100 Niños - 100 Historias
Nuestro objetivo es simple pero ambicioso: dar tratamiento a todos los problemas de movilidad de cada niño en una sola intervención.

7a Campaña
100 Niños - 100 Historias
Queridos papás y mamás
Sabemos que su camino está lleno de amor, esfuerzo y desafíos inmensos. Comprendemos sus preocupaciones por el futuro de sus hijos y su deseo de verlos crecer con mayor independencia y bienestar. Queremos que sepan: no están solos. Su fuerza y dedicación nos inspiran.
Hoy, tenemos una noticia que puede transformar la vida de sus pequeños. Gracias a un generoso donativo del Grupo Rotario Internacional y el apoyo de más de 25 empresas en la 7ª Campaña 100 Niños – 100 Historias, el Centro de Cirugía Especial de México, IAP podrá brindar tratamiento a los primeros 33 niños con Parálisis Cerebral en condición de pobreza extrema.
Esta es una oportunidad real y esperanzadora para muchas familias que, debido a limitaciones económicas, no habían podido considerar este tratamiento vital. ¡Es el momento de reimaginar un futuro con mayor independencia y alegría para sus hijos!
La 7a Campaña 100 Niños – 100 Historias del Centro de Cirugía Especial de Mexico, IAP suma el esfuerzo de personas y empresas para ayudar a mejorar la movilidad de niños con Parálisis Cerebral. A menudo, esta condición se considera “sin solución” y las cirugías convencionales son poco efectivas.
El Centro de Cirugía Especial de México IAP ofrece atención gratuita a 100 niños en condición de pobreza extrema para corregir contracturas, prevenir deformidades, problemas de salivación y alineación ocular provocadas por diferentes causas de Parálisis Cerebral y otros problemas que causan espasticidad. Esta problemática es más común en niños de escasos recursos por la falta de atención adecuada en sus primeros días de vida.

Nuestro Compromiso: Máximos Resultados con Mínimas Molestias
Nuestro objetivo es simple pero ambicioso: dar tratamiento a más de 45 músculos afectados por espasticidad en una sola intervención. Esto significa que en lugar de múltiples cirugías a lo largo de los años, trabajamos para corregir todas las rigideces y posiciones incorrectas de brazos, piernas, manos y pies en un solo procedimiento.
Mínimas Molestias, Máxima Comodidad
Para el Niño:
Una sola hospitalización en lugar de varias
Anestesia mínima y más segura
Cicatrices pequeñas y discretas
Menos dolor durante la recuperación
Pocas visitas de seguimiento al hospital
Para la Familia:
Menos días de trabajo perdidos
Menos gastos de traslado y hospedaje
Menos estrés emocional por hospitalizaciones repetidas
Terapias que se pueden hacer en casa
Recuperación más rápida y natural
Resultados que Transforman Vidas
Nuestra técnica busca devolver a cada niño la mayor independencia posible:
Movilidad mejorada: Poder caminar, sentarse o moverse con mayor facilidad
Habilidades recuperadas: Usar las manos para comer, jugar, escribir
Regreso rápido: A la escuela, a jugar con amigos, a una vida normal
Menos dependencia: Necesitar menos ayuda para actividades diarias
Mayor participación: En la vida familiar, escolar y social
El Resultado Final
Un niño que antes necesitaba ayuda constante, puede convertirse en alguien más independiente, con menos dolor, más movilidad y mayores oportunidades de desarrollo. Todo esto, idealmente, con una sola cirugía que resuelve múltiples problemas a la vez.
Porque creemos que cada niño merece la mejor oportunidad
con las menores complicaciones posibles.



El tratamiento convencional de las deformidades de un niño con Parálisis Cerebral Infantil (PCI) puede superar los 750,000 pesos, debido a múltiples cirugías, hospitalizaciones y procedimientos separados. Esto genera una infancia llena de dolor, cicatrices, yesos y largas ausencias escolares.
Gracias a la Cirugía Mínima Invasiva, el tratamiento se reduce a un solo procedimiento, lo que disminuye el costo total y acelera la recuperación.
Más de 2,000 familias en México y otros países han confiado en el Centro de Cirugía Especial de México y hemos sido testigos de transformaciones que van más allá de lo médico. Hemos visto a niños hablar, caminar, recuperar la sonrisa, a padres recobrar la esperanza y lo más importante, lograr una mejor calidad de vida para toda la familia.